Durante toda su vida mi padre aliñaba la conversación con historias, cuentos o chascarrillos.
Para empezar la andadura comparto ésta con vosotros:
“En una finca tenían un gato que vigilaba la bodega.
Un día, mientras corría entre los toneles y las tinajas, un ratoncillo se cayó dentro de una que estaba abierta. Entre tragos y pataleos el animalejo gritaba:
– ¡Socorro, que me ahogo!
De repente, ¡zaas!, una zarpa que lo atrapa y lo saca. El gato, un romano flaco y mañoso, que le dice relamiéndose los bigotes:
– ¡Vaya, vaya. Ya tengo el aperitivo!
Y el ratoncillo, lloriqueando:
– ¡Ayy, señor gato, no me coma! ¿No ve que estoy tan empapado de vino que le voy a sentar mal? Mire, si me deja ahí tumbado en ese rayico de sol, me secaré. Así podrá comerme sin que le duela la panza.
El gato, pensativo, zarandeaba al roedor:
– ¡Está bien! Te pondré cinco minutos al sol y así estarás más sabroso.
El ratoncejo se quedó quieto, como dormitando, y … En un momento de despiste, salió corriendo a toda velocidad y se metió en su ratonera. El gato le gritaba:
– ¡Tú, so mentiroso, sal de ahí! Me habías prometido que, si te dejaba secarte, te podría comer.
Y el ratón, entre risas, le contestó:
– ¡¡Sí, sí. Hazle tú caso a un borracho!!”
Seguro que muchos conocéis cuentos (más o menos largos) que explican una frase hecha o sabéis el origen histórico de esa frase. Me encantaría si las compartís aquí.
Desde mi cómodo sillón os espero.
© Margarita González Andújar y margamarviento.wordpress.com (Desde mi sillón), desde octubre de 2011. El uso no autorizado y / o reproducción de este material sin el permiso expreso y por escrito de la autora de este blog y / o propietaria está terminantemente prohibido. Los extractos y enlaces se podrán utilizar, siempre que el crédito total y claramente se dé a Margarita González Andújar y (Desde mi sillón) margamarviento.wordpress.com, con la dirección adecuada y específica para el contenido.